7 de junio de 2010

DESCUBRIMIENTO

Gracias al regalo de un amigo, hoy he descubierto a un poeta al que voy a dedicar mucho tiempo en próximas sesiones de lectura compulsiva: Karmelo C. Iribarren.

Valga para muestra un botón:

Bolsa de plástico

"Mírala
ahí
en mitad de la calle
sola
quieta

temerosa
de que aparezca el barrendero

soñando
con un poco de viento
para sentirse
nube"

4 comentarios:

Mauro dijo...

Una nube no siente miedo, eso es sólo para quienes no se atreven a volar.

Jodido aquel que condenó a quien quería ser nube a ser sólo bolsa.

Triste aquel que por sentirse bolsa, renunció a ser nube.

Un beso, pero a lo american beauty.

a pena grande dijo...

No me busques en ningún otro lado porque no he salido del blog de Lau en toda la noche, excepto para buscar poemas de ese Karmelo C. Iribarren.
Encontré muy pocos, pero buenos. Pero buenos, buenos.
Por ejemplo, éste:
LOS PARAGUAS, LOS TAXIS

Acabo de tirarlo,

35 minutos bajo la tormenta
-esperando un maldito
taxi-
han podido con él.

Pero cómo se ha portado.

Ésa es la diferencia:
los taxis son como ciertos amigos,
nunca están cuando más los necesitas.

Los paraguas, en cambio, mueren por ti.
________________________________
Ya sé que besar las manos puede significar sometimiento, respeto, subordinación, vasallaje, rendición, obediencia, pleitesía, reverencia, veneración, y otras formas de lamer el culo.
No recuerdo haberte dicho que te adoro. No es mi estilo, ni siquiera con Dios, y además te reirías.
Yo te beso las manos porque me gusta besar manos. Sin considerar que hayan sido usadas, pongamos por caso, para mesar el flequillo a renacuajos, pasar páginas en blanco o atar en corto cabos, escotas y maromos.
Tus manos, te lo mencioné, son sarmentosas, y ya sabes que la cerveza no es lo mío.
Si yo tuviese tus manos sería cuadrúmano, tecleador entreverado, saldría intacto de cualquier berenjenal y mataría a quien me las besase.
A_ship_loaded_deep_with_kisses

a pena grande dijo...

Lau
Hoy ha sido uno de los días más felices de mi vida.
En la declaracion de la renta me da a devolver casi mil euros. No sé por qué he puesto esto en primer lugar, si me importa bien poco.
Por la tarde recibí una transfusión masiva de cariño que no pienso compartir aquí.
Después me llegó un mail tan breve como certero, de mi mejor amiga. Se me quedó en la frente cimbreando. Así: tuiiinnnnggg.
Por la noche fui a un chat muy concurrido, con la idea de entretener un poco la ansiedad. Lo pasé en grande. Se hablaba de canciones, y les caí en gracia a aquellos locos nicks.
((Akellos lokos nicks, akellos lokos nicks, je, suena a rokanrol))
Hasta se tragaron la trola de que David Bowie y yo compusimos un hit a medias. Ese de "We can be heroes just for one day". A ver si la SGAE me da otra alegría...
Salí del chat porque se pusieron lo del fútbol. Fui de visita a los blogs de mi panda. Anoche había mediado entre dos blogueros que se tiraban los comments a la cabeza. Pese a mi atocinada disteclexia, logré que se reconciliaran.
Entonces, hará una hora, la tristeza, esa loba que nunca se insinúa, me dio un French kiss en la boca del estómago, la tragué entera, y me produjo una erección de abatimiento.
Ahora me estoy preguntando por qué me ha pillado este nubarrón.
¿Será que la felicidad se oxida antes de que cierre uno la mano?
¿Me vine abajo porque tengo la imaginación estrangulada desde que mi Chú se sabe todas, pero todas, las paredes que emborrono, y me siento como un buey sin arado ni atadura?
[[Le voy a explicar esto a mi Chú, aunque es muy posible que lo haya deglutido, pero también es cierto que desayuna como una fervellas, y algunas sutilezas retorcidas caen fuera de su taza.
A ver: "sin arado" por lo de "¿Adonde irás buey que no ares?".
"Ni atadura", porque "El buey suelto bien se lame". Puedes seguir con tu mermelada de moras, lambona]]
((Sin pretenderlo me ha salido un juego de palabras con lo de "lamer" y "lambona". La suerte de jugar con dos idiomas)).
¿Por qué en español no existe la palabra "lamona"= que lame, glotona? Pues porque se prestaría a confusiones y suena a chino. En cambio, dices "lambona" y se te derriten los fonemas.
Bueno, lo dejo aquí. Ahora, además de triste, estoy cansado y mejor será espantar la noche con las sábanas.
Si hay algo que me tumba es atrapar al vuelo la palabra precisa y que se me escape por ponerme a reparar en su perfecta solidez.
Hoy se zafaron varias. Me supongo que quedarán en esta cajita donde escribo y se las zampará Lenny, ese lambón.
Lauuuuuu, ¿tú que haces cuando no te sale nada?

a pena grande dijo...

Lau
Hoy he estado muy malito. Me debí de equivocar con alguna dosis y me "prestó" mal. (En mi idioma "prestar" también significa "sentar bien o mal". Ya me encuentro mejor, gracias.
Acabo de ver una foto de Eire y, la verdad, se prestaba para un jocoso comentario. Estoy seguro de que a Lenny le gustaría leer algún sarcasmo acerca de la cara de su enemiga, toda emborranchada, que parece que la parieron en una de esas alcantarillas que tanto abundan en vuestra ciudad. Cosa fea de cara.
Pero no le daré ese gustazo a mi minino favorito, porque Eyre tiene unos ojos suplicantes, como diciendo: "Por si no fuera poco haber nacido así, tan poco agraciada, por encima tengo que aguantar las continuas comparaciones con ese recién llegado, el impar ojitos-azul-cobalto-y-rabito-erguido-que -se-pavonea-como-una-prima-donna-blog-arriba-y-abajo".
Como hace días que estoy yermo, te voy a copiar aquí uno de mis poemas favoritos. Te dejo un enlace, a ver si hay suerte y lo puedes en voz de su autor:

Elegía con un poco de amargura

Ésta es otra elegía, pero
dedicada a un hombre desagradable,
vecino mío, que nunca
quiso saludarme.
No sé, por tanto, cómo se llamaba.

Cara de limón, cara de perro malo,
jamás se rebajó a mirarme
siquiera. Vivíamos
los dos en la misma calle.

Un día tras otro nos desencontrábamos.
Primero por la mañana, y luego
por la tarde.

Se murió, y,
naturalmente,
dejó de no saludarme.

Ayer lo vi venir tan él como de costumbre
y me alegró que todo fuese igual que antes.

Pero no era ni por la tarde ni por la mañana,
y en cuanto a él, tampoco era él,
como adrede.
(Eliseo Diego)
Voz_de_Eliseo